lunes, 20 de agosto de 2012

Entrevista en el diario mexicano ntesis
Persiste la incógnita sobre el futuro inmediato y mediato 
de los impresos, cual es tu posición al respecto.
No hay menor interés hoy que hace 50 años por la actualidad 
informativa, más bien al contrario. En este marco el futuro del 
periodismo debería ser brillante. Pero a diferencia de medio siglo 
atrás hay otros medios además del papel que nos obligan 
a plantear los nuevos soportes y replantear los viejos. 
Creo que la discusión: digital vs papel es incorrecta, deberíamos 
plantearnos seriamente la disyuntiva: gratuito vs pago. 
La calidad no puede ser gratis. Aceptado esto debemos trabajar 
en aprovechar las posibilidades de cada soporte.
Es probable que con productos periodísticos digitales de calidad, 
que aprovechen al máximo la inmediatez, la interactividad 
y lo visual, el papel se convierta en el soporte de la lectura 
en profundidad, de la reflexión. En ese paradigma el papel 
no pierde relevancia, toma otro lugar: quizás deba primar 
el texto sobre la imagen y probablemente no tengan demasiado 
sentido en edición diaria.

Algunos intelectuales del periodismo afirman que el valor 
agregado de los periódicos debe ser ¡el periodismo! ¿Coincides?
(Es exactamente la respuesta que di hace algún tiempo en 
una entrevista cuando me preguntaron sobre los llamados 
'valores añadidos':¡Más periodísmo!. Fue una respuesta 
nada meditada, no me di cuenta de lo dicho hasta que la ví 
publicada –el periodista la puso como destacado- y me sorprendió! 
Me pareció muy acertada. No sabía que otros lo pensaran igual 
y mucho menos que yo fuera un intelectual del periodismo!)

Cuando gasto dinero comprando un diario no espero que me den 
información o una sartén. Los medios hacemos buen negocio 
con las sartenes y creo que no es un tema menor: generar ingresos 
asegura la independencia informativa, pero también creo que 
debemos  regresar un  tiempo donde el primer fin del periodismo 
-o al menos el inmediato- no era hacer dinero.
En cuanto a la información nunca cómo ahora habíamos podido 
disponer de tanta, de forma tan rápida y de todo tipo, y ¡gratis!. 
Pero información en bruto no es periodismo.
Como lector que paga por un producto informativo espero que 
me ofrezcan periodismo, y esto no es el trascripción del comunicado 
de un político o el balance de una empresa. Me refiero a apuestas, 
investigaciones en profundidad, fuentes fiables y chequeadas, 
una meditada elección del género a usar, con análisis y opiniones 
de reconocidas firmas que me ayuden comprender mejor las 
realidades del complejo mundo en el que vivimos. Todo ello 
realizado con una incuestionable ética e independencia. 
Un periodismo entendido así es caro de hacer y puede que 
no sea muy buen modelo de negocio, pero entendido de otro 
modo creo que desaparecerá y las sartenes habrán resultado 
un modelo de negocio desastroso.

En la octava edición de la Cumbre tu participas como ponente, 
cual será el tema que abordaras.
Procurare explicar la línea de pensamiento que rige mí trabajo 
en los últimos años. Una línea que tiene al lector como centro, 
pero que ignora quien es este. 'El lector' es un ente que no existe 
y, en consecuencia, los medios terminan hablando casi siempre 
de generalidades. Yo me tomo a mi mismo como punto de partida: 
yo soy un lector, de hecho soy el único lector posible, el único 
que conozco. Aunque es muy posible que sea un lector minoritario, 
la experiencia me indica que somos suficientes para que las temáticas 
que trato y el modo en que lo hago tengan un espacio.
Mi trabajo mas reciente hace trabajar ‘lo visual’ como contenido. 
No es el contenedor de una temática, es contenido en si mismo, 
no colabora con el texto, las fotos o los datos, de hecho, los utiliza 
para invitar al ‘lector’ a la reflexión.

Sobre el periodismo militante en política, es valido, y si lo 
es como debe plantearse al lector.
En mi concepción de organización social la política es imprescindible 
y mi concepción de lo que es política es inherente al individuo 
y, por tanto al periodismo ¿no es la elección de un tema determinado, 
o la redacción de un titular concreto, un acto político? La tendencia 
política concreta de un medio se puede apreciar en el transcurso 
de todas las páginas, no solo en su editorial.
Al considerar este hecho como inevitable soy partidario de que 
los medios olviden la panacea de la objetividad y tomen partido 
abiertamente por una opción, si no en general si, al menos, en 
temáticas puntuales que afecten al ciudadano. De hecho los lectores 
sabemos que ideario político tienen nuestros medios aunque 
estos no lo manifiesten.
En el orden actual de las cosas, con un mundo cada vez más pequeño 
y en la actual crisis económica, el poder político se hace más necesario 
que nunca como regulador de valores, casi todos vinculados 
de algún modo a la economía.
El periodismo tiene un deber ciudadano en ese sentido. Un deber 
histórico, de observancia de las buenas practicas, pero sólo se puede
hacer  desde la conducta ética intachable. Los medios, en general 
mantienen una actitud correcta frente a casos notables de corrupción, 
pero debe extremar su conducta hasta los detalles menores: no se 
debe asistir a una rueda de prensa de un político que no admite 
preguntas, o acompañar a un político en viaje diplomático con 
el pasaje pagado por este. Debemos mantenernos al margen de 
cualquier conducta que pueda condicionar nuestra opinión, pues 
esta se vera reflejada en la cobertura que realicemos.

viernes, 17 de agosto de 2012

Próximas ponencias y workshop
7 al 9 de septiembre
Escola Muuu
Lleida, España

Todos podríamos explicar a que se dedica un zapatero, una playmate o un astronauta, incluso un sexador de pollos; pero ¿quién es y a que se dedica un infografista?. ¿Se trata de una especie de periodista?, ¿un pseudodiseñador?, ¿un ilustrador que además escribe?, ¿es una mezcla de todo, a modo de hombre orquesta o un hiperespecialista?, de hecho ¿se trata de una persona? o, como algunos sospechan es un programa informático.

Todos sabemos que es un zapato, las medidas que debe tener una playmate o donde viajan los astronautas, incluso algunos han visto ¡un pollo vivo!; pero ¿qué es una infografía?
Las vemos cotidianamente: al comprar un mueble en IKEA, al intentar escapar de un incendio o al leer el diario por encima de un hombro desconocido; incluso nosotros mismos, de forma
inconsciente, las hacemos: cuando explicamos a un amigo, al que invitamos a cenar por primera vez, como llegar a nuestra casa o como conectar los cables de un interruptor conmutado. Sin embargo pocos conocen si su materia prima es el periodismo, la ilustración, el diseño o una extraña amalgama de ambas. ¿Cómo podemos saber cuando una infografía está bien realizada?, ¿puede una infografía ser ‘fea’ y buena y viceversa?, ¿de que dependen sus dimensiones?, ¿y su peso informativo? y por último ¿quién diantre decide que se publiquen?

Un miembro destacado de la comunidad infográfica, una de las más reducidas y herméticas del mundo, nos explicará cual es su rutina laboral, que conocimientos ha adquirido para desarrollar su extraño oficio, la relación que necesariamente mantiene con otras profesiones por todos conocidas (periodismo, fotoperiodismo, diseño editorial) y por que estos profesionales tampoco saben con exactitud que hacen los llamados infografistas en la redacción de un medio periodístico.


Una charla que de forma amena nos explicará por que, a pesar de formar parte destacable desde hace 25 años en la prensa diaria, la infografía sigue siendo una de las profesiones más extrañas que existen en el mundo. Un oficio que no dispone de una acepción en la RAE (aunque eso, quizás, sea lo menos raro de todo este asunto)


Más información 




















miércoles, 15 de agosto de 2012

‘Cien líneas, cincuenta trazos’
Se les pidió a cien personas que mantenían o habían mantenido una relación de pareja, que mediante una línea trazasen, sobre una plantilla, la percepción emocional que habían tenido dentro de la relación en el transcurso del tiempo.
Las líneas azules son representaciones femeninas y las naranjas masculinas.
Todas las líneas parten del mismo punto: el momento en que se inicia la relación. Se ha tomando este punto como eje para valorar una percepción de estado emocional: mejor (cuando asciende) o peor (cuando desciende) que en el momento de iniciar la relación.
El tiempo de relación transcurre en el eje horizontal.
El círculo, al final de algunas líneas, identifica a las parejas que abandonaron la relación-

Las líneas negras que unen las dos líneas de color nos muestran el desfase emocional y  temporal que en la mayoría de trazos se produce.

Lápiz y acrílico sobre papel
70 cm x 100 cm

Enero del 2018




Adaptaciones editoriales:
'El Mundo'. España. Marzo del 2018
'El Financiero'. México. Agosto del 2018

'La Nación'. Argentina. Noviembre del 2018

Trabajo que forma parte de la serie 'Amores superpuestos'

Acrílico, óleo, técnica mixta, collage, bordado, ordenador... Estos trabajos de los alumnos de mi curso 'Infografía creativa: entre ...